Apocalipsis

El día que me despierte
y me olvide de cada rasgo de tu cara 
no voy a escribirte nunca más.
La tarde que, mientras tome un café,
piense en tus ojos y dude de su color
no voy a buscarte nunca más.
La noche en que me acueste
y no mentalice tus manos en mi cuerpo
no voy a llamarte más.
El momento en que me enoje
porque no logro entenderte,
voy a esconderme para que no me vuelvas a encontrar.
El instante en que pierda la paciencia
cansada de luchar contra tu lado oscuro
voy a perderme entre la multitud.
Cuando abra los ojos y vea todo lo que ahora no puedo ver,
puede que ocurran muchas cosas
lo importante es que si corre sangre no se note.
Lo verdaderamente importante
es tratar de hacer como que jamás nos conocimos.